jueves, 17 de septiembre de 2009

Socialmente enredados

Estoy reflexionando sobre las redes sociales. No es puro vicio teorético; es parte de mi trabajo (como dijo el torero Guerrita cuando conoció a Ortega y Gasset y le dijeron que aquel hombre se dedicaba a pensar: “hay gente pa tó”). Claramente una parte importante de todo esto es puro exhibicionismo y vana ilusión de que a alguien le interesen nuestras menudencias o nos encuentre ingenioso. Pero no todo es humo y ego. Los medios sociales han revolucionado la forma en que nos comunicamos, nos relacionamos y compartimos el acervo colectivo. Nos guste –sea una pérdida de tiempo, atontezca, sustituya la verdadera interacción, inserte aquí su plaga bíblica favorita– o no. El mensaje unidireccional está en peligro de extinción, cualquiera se sube a su atril para convertirse en líder de opinión, vivimos vicariamente en mundos paralelos donde nos inventamos un alter bajo el que poder ser más nosotros que nunca. Y lo curioso es que a la vez que hacemos todo lo anterior, echamos de menos las puertas del campo. El otro día, en un gesto de nostalgia, le dejé a Adam una nota pegada con celo en la puerta para avisarle de que no tocara al perro en el cogote, que le había echado la dosis mensual de matabichos. Qué nudo de contradicciones somos.

jueves, 10 de septiembre de 2009

De vuelta

Después de una prolongada ausencia de este blog que no intentaré justificar, heme aquí. De vuelta. El verano pasó (digan lo que digan los que se fían del equinoccio). Adam volvió a casa tras sus aventuras asiáticas (para el que no esté enterado, aquí esta su correspondiente blog). Nuestras vacaciones indochinas estupendamente. La visita relámpago a España para la boda de Diego y Tana fenomenal. Ahora toca retomar el curso –actividad y proyectos, pequeñas preocupaciones irreales- y disfrutar del fresco olor otoñal de las mañanas y los atardeceres de septiembre. Me gustaría decir con Celtas Cortos que “nos vemos en los bares”, pero me temo que a lo que en verdad me refiero es a que “nos vemos en los blogs”.

martes, 20 de enero de 2009

Salieron a su paso

Una marea humana ha llenado hoy la explanada monumental frente al Capitolio para ser testigo de un momento hist'orico y poder contarle a sus hijos que ellos estuvieron all'i. No me enrollo... es mejor releer el discurso de toma de posesi'on de Barack Obama y, obviando las querencias grandilocuentes del americanismo, apreciar la lecci'on de oratoria y las buenas intenciones de este hombre.

Por cierto, qu'e momento cuando ha recordado que George Washington hizo leer a sus desmoralizadas tropas las siguientes palabras de Thomas Paine:

"Que se cuente al mundo del futuro que en las profundidades del invierno, cuando nada salvo la esperanza y la virtud podían sobrevivir... la urbe y el país, alarmados ante un peligro común, salieron a su paso."

Habr'a que aplicarse el cuento y salir al paso de nuestro peligro com'un.